El Gobierno formalizó a través del Boletín Oficial la propuesta para que Ariel Oscar Lijo y Manuel José García-Mansilla integren la Corte Suprema de Justicia de la Nación. La postulación se debatirá en audiencia pública y en el Senado.
La Corte Suprema, compuesta actualmente por cuatro integrantes –Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti–, se enfrenta a la próxima jubilación de Juan Carlos Maqueda, lo que impulsó al presidente Javier Milei a acelerar el proceso de selección para llenar la vacante.
En la propuesta formalizada a través del Boletín Oficial para la nominación de Ariel Oscar Lijo y Manuel José García-Mansilla como integrantes de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, se destacó el cuidadoso proceso de preselección llevado a cabo. En este sentido, el Gobierno sostuvo que consideró meticulosamente el prudencial respeto al buen nombre y honor de los propuestos, así como también su idoneidad técnica y jurídica, su trayectoria y su compromiso con la defensa de los derechos humanos y los valores democráticos.
Además, se estableció un período de quince días para que la ciudadanía y diversas organizaciones presenten posturas y observaciones fundamentadas sobre los candidatos. Sin embargo, se aclaró que las objeciones deben ser pertinentes y basadas en argumentos sólidos, evitando aquellas que carezcan de relevancia o que se basen en discriminación.
La idea del Gobierno es que Lijo cubra la vacante que existe desde que se jubiló Highton de Nolasco; y que García-Mansilla ocupe el lugar que dejará a fin de año el juez de la Corte Juan Carlos Maqueda, que cumple 75 años en diciembre.
En medio de este proceso, surgieron controversias y cuestionamientos sobre las nominaciones, especialmente en el caso de Ariel Lijo. La denuncia de Elisa «Lilita» Carrió, fue una de las que más resonó, porque además de señalar que no es idóneo para el cargo, pidió que se lo investigue por enriquecimiento ilícito.
Ahora, la nominación de Lijo y García-Mansilla será sometida al escrutinio público y al debate en el Senado, donde se realizarán audiencias públicas para evaluar los antecedentes y las aptitudes de los candidatos. Este proceso permitirá un análisis exhaustivo de las controversias y los argumentos a favor y en contra de las nominaciones, antes de que el Senado tome una decisión final sobre su confirmación.
FUENTE: BORDER PERIODISMO