Cómo nació la entrañable amistad de Bizarrap y Franco Colapinto: de una ayuda desinteresada al sueño cumplido que revoluciona a la Fórmula 1
ACTUALIDAD03 de noviembre de 2024..El productor musical brindó apoyo económico y conectó al piloto con patrocinadores que posibilitaron su llegada a la máxima categoría. Los encuentros en las carreras y la promesa para cuando llegue el primer podio
Franco Colapinto vive uno de sus mejores momentos en el automovilismo internacional y, con la mirada puesta en asegurar un asiento en la Fórmula 1 para 2025, el piloto argentino continúa destacándose en la pista. En ese sentido, el Gran Premio de Brasil es el desafío actual del argentino, quien hasta ahora acumuló 5 puntos en el campeonato y hasta se ganó el elogio de campeones como Lewis Hamilton y Max Verstappen.
Desde su disciplina hasta su mentalidad, existen diversos puntos que explican el ascenso del joven. Sin embargo, nada hubiera sido posible, al menos en el corto plazo, sin la ayuda de Bizarrap. De forma desinteresada, el reconocido productor musical ofreció su apoyo económico en uno de los momentos más complicados del corredor. Este suceso no solo fue un fuerte respaldo, sino que dio paso a una amistad única.
Meses antes de que Franco se convirtiera en la estrella que es hoy, el joven piloto buscaba destacarse en el mundo de la Fórmula 2. Pero más allá de su talento y grandes deseos, la falta de sustento económico llegó a poner en riesgo su continuidad. Fue en ese entonces que Gonzalo Julián Conde, el nombre real de Biza, llegó a su vida y se transformó en uno de sus aliados cruciales.
La relación entre el piloto y el productor surgió de forma inesperada. Sin ningún tipo de relación previa, el DJ decidió escribirle al deportista a través de las redes sociales. “Yo de este ambiente (Fórmula 1) conocía a Pierre Gasly. Pero un día mi viejo me mandó una nota que decía que Colapinto necesitaba sponsors, y le pegué un llamado”, confesó el productor en diálogo con ESPN. “No nos conocíamos ni nada, lo llamé y le pregunté en qué podía ayudarlo”. Fue ese primer contacto lo que permitió que figuras y empresas clave, como Martín Migoya de Globant y YPF, se sumaran al equipo de apoyo de Colapinto y le dieran al piloto la oportunidad de mantenerse competitivo.
Uno de los primeros logros que alcanzó Colapinto tras el apoyo de Bizarrap ocurrió cuando el argentino aún corría en F2. Tras una gran actuación en el Gran Premio de España, el joven finalizó segundo, detrás de Jack Crawford (DAMS), en el circuito de Montmeló. Una vez en el paddock, Franco se encontró con el productor. “¡Bien! La rompiste. Te daban tres vueltitas más y quedabas primero”, le dijo Bizarrap apenas lo vio, antes de darle un fuerte abrazo. “Me trajiste suerte”, le contestó el piloto, a lo que el músico respondió ante las cámaras de la transmisión oficial: “Tengo que venir más seguido”.
En el podio, Colapinto aprovechó para dedicarle el triunfo al músico, a esa altura uno de los responsables de que pueda competir en la F2. El piloto recibió el trofeo, bajó del escalón y cuando se acercó al escenario se cambió la gorra y se quedó con la del productor musical, quien también compartió un video en sus redes sociales que filmó a través de su celular: “Dale papá”, escribió el artista en una historia que compartió en su cuenta de Instagram.
El compromiso de Bizarrap con Franco Colapinto trascendió rápidamente el apoyo inicial y se convirtió en un respaldo visible y continuo. Además de haber conectado al piloto con grandes patrocinadores, el productor musical decidió respaldar personalmente al corredor como sponsor. Este sostén se volvió tan simbólico que el argentino lleva en su casco las siglas “BZRP”, una señal inconfundible de la alianza que los une. Esa colaboración no se percibió únicamente en la pista, sino que el deportista llevó la característica gorra del músico incluso en el área de boxes.
Si la alegría por el progreso de Franco en F2 ya entusiasmaba a Bizarrap, la noticia de su llegada a la Fórmula 1 lo terminó de enloquecer. “Nosotros nos enteramos el sábado pasado. Yo estaba llegando al estudio y me llega un mensaje de Franco diciendo ‘Amigo, te tengo que llamar ya’. Franco me tiró: ‘Me llamaron de Williams que tengo que subir. Necesito sponsors’… Ahí yo le pregunto: ¿Seguro Fórmula 1?, ‘Casi confirmado Fórmula 1′, me dijo. Ahí me volví loco”, reveló Bizarrap en una entrevista con el YouTuber español Víctor Abad. Y añadió: “Llamé a mi mánager que tiene buena relación con Martín (Migoya), también estaba Gastón (Parisier) y dijimos tenemos que conseguir sponsor. Otra vez Globant como sponsor, se sumó Mercado Libre y el Automóvil Club”. De esa manera se logró reunir el presupuesto necesario para poder correr las últimas nueve fechas de la presente temporada de la máxima categoría del automovilismo.
A los pocos días de este diálogo, Colapinto debutó en la F1 en Monza y superó las expectativas, ya que largó 18° y terminó 12°. Hizo tres sobrepasos, llegó a tener ritmo de punta y superó a su compañero de equipo en Williams, Alex Albon, en la última vuelta. Ya en su estreno tuvo un mejor resultado que en 13 de las 14 carreras de Logan Sargeant, quien fue desvinculado del equipo inglés luego de destrozar su auto en la tercera práctica libre en el circuito de Países Bajos.
Desde entonces, el apoyo de Bizarrap no faltó en ninguna carrera. Una muestra fue cuando Colapinto logró un hito histórico en el Gran Premio de Azerbaiyán al convertirse en el primer argentino en 42 años en sumar puntos en una carrera de Fórmula 1. El joven piloto de 21 años comenzó en la octava posición y, tras una carrera estratégica en el desafiante Circuito de Bakú, logró finalizar en el mismo puesto. Al final de la carrera, el músico posteó en sus redes: “Franco Colapinto, viejo, nomás”.
Tras esa gran actuación, la máxima categoría se trasladó a Estados Unidos. Allí, el piloto argentino revolucionó Austin y contó un conflicto que tuvo por querer usar la gorra de su amigo. Todo comenzó cuando una joven con un cartel de Bizarrap le preguntó si usaría la gorra al subir a un podio, tal como había hecho en la F2. “Se armó… Si ustedes supieran el quilombo que hice para hacer eso… Ojalá. Voy a intentar, me la voy a llevar y cuando esté en un podio de F1 me la voy a poner aunque me echen al día siguiente”.
De acuerdo a su relato, una trama de esponsoreo y exclusividades atentó contra su gesto de lealtad y agradecimiento. “En teoría, firmás un contrato a principio de año que tenés que tener la gorra de Pirelli puesta todo el tiempo que estás en el podio. Y yo, claro, no la tuve todo el tiempo la de Pirelli puesta. Hubo problemas, pero ya está solucionado”, recordó Colapinto desde el escenario.
Carrera a carrera, el furor por el corredor no para de crecer. Una muestra de esto se dio cuando Colapinto llegó a México. Allí, el joven no solo se reunió con Bizarrap, sino también con otros referentes de la escena urbana, como Nicki Nicole y Duki. “Gracias de parte de todos los argentinos porque sabemos lo importante que fuiste para que Franco esté en la Fórmula 1”, le consultó un periodista local al productor, quien no ocultó su alegría y respondió en diálogo con ESPN: “Fue clave el apoyo de todos los argentinos”.
Sus amigos también se sumaron a la francomanía: “Es un orgullo, estamos alentando a full. Lo vinimos a bancar entre amigos. Es un orgullo que represente a la bandera”, señaló la rosarina. Para cerrar, el rey del trap también declaró su fanatismo: “Ya me enganché en la Fórmula 1, por culpa de Biza, muy feliz de ver a Franco por primera vez. Es lindo ver que alguien como nosotros esté cumpliendo sus sueños, está pisando fuerte en el mundo. Ahora uno entiende lo difícil y complicado que es que Franco haya llegado hasta acá. Es un sueño para todos, vinimos a compartirlo con él”. Ese sueño que hoy moviliza a un país, y que no hubiera sido posible sin el impulso de un joven productor, fanático del deporte y de la argentinidad, que le dio el empujón necesario para que todo el país esté hablando de él.
FUENTE; INFOBAE