Convocan jóvenes para formarse como dirigentes políticos. Un partido encogido a su mínima expresión.
Mauricio Macri parece haberse resignado, solo por el momento, a que su espacio se achicó. No solo sus votantes, sino sus bloques legislativos, que además de la merma de votos sufrieron una rapiña sin pausa de La Libertad Avanza hasta dejarlos reducidos a su mínima expresión. Así las cosas, Macri parece haber decidido desensillar hasta que aclare. Se replegó hacia la Fundación Pensar, que conduce María Eugenia Vidal. Juntos, hicieron una convocatoria a jóvenes para un programa de formación de dirigentes políticos, del que saldrían las nuevas generaciones de dirigentes PRO. Siguen con el plan de un candidato propio en 2027, pero por ahora seguirán acompañando las leyes que propone La Libertad Avanza.
El PRO cierra un año para el olvido: fue derrotado en la Ciudad de Buenos Aires en mayo por La Libertad Avanza con el candidato más anodino que pudieron conseguir. Esto forzó a una discusión interna que terminó con la sumisión en las listas en septiembre y octubre, donde Karina Milei les dio menos que poco. A continuación, desplumó lo que quedaba de los bloques con ayuda de Patricia Bullrich. ¿El resultado? El bloque de Diputados del PRO pasó de 40 a 12 miembros, y el de Senadores de 7 a 3. Macri se tiene que preparar para conducir un partido chiquito. Como respuesta, rearmaron la alianza con los radicales y otros sectores y en Diputados construyeron un interbloque de 22.
Ahora todo será negociar y negociar. Macri plantea que apoyarán lo que consideren que está bien, pero no habrá alineamiento automático con el Gobierno. En la práctica, la mayoría de las reformas parecen encaminarse a aprobarlas, empezando por la laboral. No obstante, antes de eso vendrán algunas espinas con el Presupuesto 2026.
El jefe de Gobierno, Jorge Macri, anticipó ante funcionarios nacionales que el aval del PRO estará condicionado a que el proyecto incorpore la coparticipación que la Corte Suprema reconoció a la Ciudad: el 3,5 por ciento de los fondos, transferidos de manera semanal. El jefe de Gobierno insistió en que esa modalidad debe figurar de forma textual en el articulado presupuestario. En el Gobierno intentaron tranquilizarlo, pero por lo bajo consideran que Jorge Macri controla unos pocos diputados y no podrá cumplir su amenaza.
La semana pasada, en un encuentro de la Fundación Pensar, Macri advirtió que seguirá marcando un contrapeso con el Gobierno y señalando las cosas que no le gusten, como ya le aclaró a Santiago Caputo. No es casual que el ex presidente haya hablado en la Fundación Pensar. El think tank que conduce Vidal parece ser el lugar donde los macristas paladar negro decidieron replegarse hasta que mejore el escenario.
La idea de Macri y Vidal es reconstruir una agenda y equipos técnicos desde allí. Para eso, llenaron un auditorio en el Hotel Abasto y el ex presidente los arengó: les dijo que ahora eran menos, pero que los que quedaban no tenía precio y no se pensaban ir. Todavía escuece el desplume que sufrieron en ambas cámaras del Congreso, además de en la Legislatura porteña y la bonaerense. Para Macri el PRO que se viene será menos masivo, pero más coherente, sin tantos sectores tironeando para pintarse de violeta.
Además, Macri está pensando que tiene que recomponer su relación con las nuevas generaciones y volver a apostar a sumar dirigentes sub40, como en un momento se dedicaban a buscar Esteban Bullrich y Guillermo Dietrich. Así que con Vidal lanzó una convocatoria en redes para sumar cuadros a un curso de formación que pretende renovar las filas del PRO.
“Arranca el nuevo Pensar Futuro 2026 y queremos invitarlos. Requisitos menos de 40 y tener un aval dentro del partido. Así que espero que lo consigan y se preparen porque la Argentina necesita de mucho talento”, dijo Macri, al tiempo que Vidal detalló que los cursos van a ser con las universidades de San Andrés, Di Tella y la Austral.
Se trata, según figura en la web de la Fundación Pensar, de un programa “programa de formación en liderazgo diseñado para jóvenes dirigentes y profesionales de menos de 40 años de toda la Argentina. En su segunda edición, se busca brindar herramientas prácticas y conocimientos actualizados para enfrentar los retos de la gestión pública y política en el contexto actual, desafiando los modelos tradicionales y promoviendo el cambio activo".
Mientras piensa la formación de nuevos cuadros, Macri deberá surfear las discusiones parlamentarias de 2026, que es un año que viene cargado de conflictos, y tendrá que pensar como cumplirá su promesa de poner “un candidato PRO” en las elecciones de 2027.
FUENTE: PAGINA12
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