Lo afirmó la vicegobernadora al encabezar la presentación de 685 aspirantes que se incorporarán al Servicio Penitenciario provincial. El ingreso tuvo lugar en la Escuela Penitenciaria ubicada en Las Flores, y forma parte del plan de expansión de plazas carcelarias -7.352 en total- en el que la Provincia invierte más de 414.000 millones de pesos.
La vicegobernadora de Santa Fe, Gisela Scaglia, junto al ministro de Justicia y Seguridad, Pablo Cococcioni, encabezaron este lunes el acto de presentación de 685 nuevos aspirantes al Servicio Penitenciario provincial. La actividad se desarrolló por la mañana en la Escuela Penitenciaria ubicada en la Cárcel de Las Flores. Durante seis meses, los ingresantes realizarán el curso de formación para suboficiales antes de sumarse al servicio activo.
El ingreso se enmarca en la estrategia del Gobierno santafesino para reforzar el sistema penitenciario y acompañar la expansión de plazas en todo el territorio, dentro de un programa que busca vaciar comisarías y fortalecer el régimen penitenciario. La obra central es la Unidad Nº 8, conocida como El Infierno, en Piñero, destinada a reclusos de alto perfil -narcos, sicarios y líderes criminales-, con 1.152 plazas y el mayor nivel de seguridad del continente.
Personal capacitado y entrenado
Scaglia aseguró que para el Gobierno Provincial “es muy importante la formación dentro del Servicio Penitenciario, porque estamos llevando adelante una inversión histórica que nos permitirá tener el doble de celdas a partir de la construcción de cárceles nuevas”. Añadió que “también estamos trabajando para mejorar las que tenemos, lo que requiere de un personal capacitado y entrenado para la problemática que hoy enfrentamos”.
La vicegobernadora subrayó que “el desafío que tiene la formación de los nuevos aspirantes es tomar con mucha consciencia el cargo para el que aspiran: formarse, estudiar y pensar que esta tarea la van a tener que hacer con honradez y compromiso con la provincia, pero también con la sociedad, que día a día observa lo que hacemos en el sistema penitenciario”. Y remarcó que ese plan “debe darnos certezas de que podemos caminar por la calle, estar más seguros y recobrar paz”.
En el acto también estuvieron la secretaria de Asuntos Penales, Lucía Masneri; la subdirectora del Servicio Penitenciario, Gabriela Tarnoski; el director de la Unidad Penitenciaria Nº 7, Gustavo Tabisi; y autoridades de la plana mayor del organismo.
Carrera moderna
El plan incluye además la ampliación de unidades penitenciarias. En paralelo, se inauguró la Subunidad Nº 4, que recibe internos trasladados desde comisarías de Rosario, liberando a efectivos policiales para tareas de prevención e investigación. En total, la Provincia prevé alcanzar 7.352 plazas, con una inversión superior a 414.000 millones de pesos.
Cococcioni destacó que “estamos estrenando una ley orgánica nueva que prevé un diseño de carrera moderno para los tiempos que se avecinan”. También explicó que “estamos recibiendo la primera de algunas promociones muy importantes para acompañar un programa de obra pública penitenciaria ambicioso, por el que vamos a crear más plazas en cuatro años que en los últimos cincuenta. Así terminaremos con los presos en comisarías y tendremos condiciones para un tratamiento penitenciario segmentado según el nivel de peligrosidad y tipología criminal de cada persona privada de la libertad”.
Masneri, por su parte, resaltó que el Servicio Penitenciario es “una pata fundamental del plan de seguridad de la provincia”, y señaló que los nuevos aspirantes “son los primeros futuros suboficiales con certificación profesional a nivel nacional” y, además, “la primera promoción que viene a completar necesariamente las nuevas unidades penitenciarias que se construirán en Santa Fe”.
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